El procesamiento digital de Audio, es una tarea que absorbe mucho de los recursos del sistema, y de sus capacidades de E/S. Recomiendo como mínimo, una máquina con procesador de tipo Pentium.
Si está usted por codificar audio desde una fuente analógica, una tarjeta de sonido PCI, le dará los mejores resultados. La diferencia en el rendimiento de E/S entre placas ISA y PCI, es muy significativa, mas de 132 Mbits/seg en el caso de tarjetas PCI (valor tomado del PCI-HOWTO). Naturalmente, mientras mejor sea la calidad de la placa sonido en cuanto a su relación señal-ruido, mejor será la calidad de los archivos MP3 que se obtenga. He estado usando una SoundBlaster PCI128, y la cambié por una SoundBlaster Live Value; ambas tienen excelente desempeño, pero la Live tiene una relación S/R bastante superior, suficiente para un trabajo semi-profesional. Recuerde la vieja máxima del procesamiento de datos: «ˇSi entra basura, sale basura!».
Cuando grabe señales analógicas de audio a su disco duro, procedimiento conocido como d2d o Direct-To-Disk (Directamente al disco), el rendimiento de su disco e interface serán críticos. Si utiliza un sistema basado en tecnología IDE, modo 4 o Ultra-DMA, procure que sean tan veloces como pueda en su tasa de transferencia.
La solución ideal sería emplear un sistema basado en SCSI, puesto que sus interfaces y discos obtienen de lejos, mejores rendimientos, cercanos en trabajo constante a valores de entre 5mbits/sec para SCSI I hasta 80mbits/sec para SCSI Ultra2 Wide. Los discos IDE podrán alcanzar velocidades de 8.3 MB/s a 33 MB/s para Ultra-ATA, pero recuerde que esos son sólo valores de pico. Los valores promedio son bastante menores. Si puede hacerse con un disco SCSI AV, hágalo. Los discos AV tienen el sistema de cabezas de lecto-escritura optimizado para la trasferencia constante de datos. Los otros discos, tanto IDE como SCSI, no pueden soportar la transferencia constante de datos, debido al calentamiento.
Claro que un disco que posee caché, dará mejores resultados que otro que no lo tenga, actuando como búfer para los casos en que el desempeño de las cabezas se vea excedido por las necesidades de transferencia.
Si su disco no cumple con las especificaciones de arriba, su grabación estará plagada de ruidos y saltos, en las partes en que el disco no haya podido escribir la señal digitalizada. Si piensa dedicarse a grabar sucesos irrepetibles, como recitales en vivo, será mejor que invierta en tecnología SCSI.
Otra causa de fallos en la escritura directa al disco, es un sistema sobrecargado. Las tareas corriendo en segundo plano pueden frenar momentáneamente al sistema. Se recomienda correr tan pocas tareas en segundo plano como se pueda, en particular servicios basados en redes. Para más información acerca de la configuración de los servicios de red, así como scripts de inicio, refiérase a las guías del Administrador de Redes y Administrador del Sistema.
El trabajo de la memoria de intercambio puede enlentecer también el sistema, así que lo mejor será que instale tanta memoria RAM como pueda; le recomiendo 32Mb como mínimo, pero de seguro le vendría bien un poco más.
Para los que quieren obtener lo máximo de sus sistemas, optimizar el kernel probablemente no sea una mala idea.
Si bien las especificaciones de hardware de más arriba, le dejarán ante un equipo mínimamente decente para sus trabajos de codificar información de audio, no dude experimentar con equipos más viejos/más pequeños, si no tiene nada mejor a mano.
Es un buen desafío para un sysadmin, lograr resultados satisfactorios de un equipo más pequeño.
Otro factor importante es el cableado de audio. Los cables y conectores baratos, de baja calidad, producirán como resultado, grabaciones de calidad pobre. Si su tarjeta admite el uso de conectores RCA, prefiéralos. Usar conectores dorados, y mantener los cables de audio apartados de los de alimentación o datos, ayudará a evitar interferencias y elevar la calidad (si no tiene más remedio, crúcelos a 90 grados).
Pero tenga en cuenta que la fortuna que gaste en el mejor de los cableados, se perderá si el resto del equipo no ha sido optimizado.
Para extraer la información de audio desde la unidad de CD-ROM, la velocidad será factor determinante del tiempo que tome la lectura de los datos desde los discos. Una lectora de simple velocidad, será demasiado lenta, a menos que se arme Vd. de mucha paciencia.
Si su CD no tiene capacidad de extracción de audio por el bus de datos, no está todo perdido; la unidad de CD-ROM se puede conectar a la tarjeta de sonido, bien sea utilizando el conector interno, o uniendo la salida de auriculares de la lectora, con la entrada de línea de la placa de audio. Regule el volumen de los auriculares hasta que no note distorsión.
Aunque ni los niveles de salida ni la impedancia de la toma de auriculares son iguales a los de línea, estos se compensan, y se pueden obtener resultados aceptables, y esto aplica para cualquier otro dispositivo con salida de auriculares, como por ejemplo, walkmans, sintonizadores de radio portátiles. minidiscs portátiles, etc. De todos modos, sólo debe ser utilizado como último recurso, cuando no haya otro medio.
Para obtener información detallada acerca de cómo configurar su placa de
sonido, sería muy aconsejable la lectura del Sound-HOWTO (Su traducción,
Sonido-COMO está disponible en
http://www.insflug.org/documentos/Sonido-Como
).